En épocas antiguas los humanos con la necesidad de supervivencia comenzaron con la caza y pesca de distintos animales, con el paso del tiempo y realizando nuevos descubrimientos desarrollaron técnicas para el cultivo de distintas plantas y frutos, generando así nuevas formas de alimentarse. Donde las herramientas que utilizaban eran la oz o pala o si el agricultor contaba con recursos necesarios eran utilizados los tractores, de manera que su producción era escasa y se limitaba para el propio consumo del agricultor y su familia. En los años 60´s y 90´s se realizaron investigaciones para mejorar el rendimiento de cultivos, así como la calidad de los mismo generando una revolución en la forma en que hoy en día se realizan los procedimientos y el uso de distintas maquinarias.
A lo largo de los años los humanos han desarrollado herramientas y técnicas para la siembra de distintos tipos de cultivo, abarcando más del 30% de la superficie de labranza en el mundo, desarrollando uno de los más grandes comercios internacionales, puesto que hoy en día la agricultura es una fuente muy importante de ingresos para los países que se dedican a ello, puesto que la exportación de frutas y verduras se ha hecho una necesidad indispensable en la vida, ya que no en todos los países se puede realizar la siembra de frutos y vegetales, les es necesario importar desde otros países o continentes los frutos necesarios para la alimentación cotidiana. Y teniendo en cuenta las tendencias de alimentación sana que se viven hoy en día es indispensable contar con este tipo de cultivos.
Hoy en día la forma en que se cultivan la plantas es totalmente diferente a lo que antiguamente se hacía, puesto que con el desarrollo de las tecnologías se han implementado una variedad de semillas de alto rendimiento, prácticas de riego inteligente, es decir, con drones especializados, fertilizantes y plaguicidas orgánicos, sembrar varios tipos de cultivos al mismo tiempo, lo que se conoce como rotación de cultivos, etc. Conforme avanzan las tecnologías se van creando nuevas maquinarias que ayudan en los procesos de la preparación del suelo, el riego, la siembra de las semillas, la recolección del cultivo, la fertilización y el control de plagas, en cada una de estas actividades se necesita la participación de maquinaria moderna haciendo más sencillo, rápido y efectivo los métodos y técnicas de siembra.
La agricultura moderna, permite conservar y proteger los recursos naturales, proveer de comida y combustible a un país entero ya que hoy en día es uno de los principales comercios en el mundo, todo ello de una manera financieramente viable para productores y consumidores. Y para ello es necesaria la inversión en investigación agrícola, el desarrollo y la extensión, así como la implementación de mayores bienes y servicios y la mejora en la práctica de procesos, los cuales se derivan de estas investigaciones, para mantener una mejora continua de calidad y servicio por parte de las industrias agrícolas.